Nota Informativa sobre Cambio Climático
Los
glaciares en el lado oriental de los Andes son también la fuente de los arroyos
que alimentan los principales ríos de la cuenca Amazónica, al este. Estos
glaciares contribuyen de manera importante a generar los sedimentos ricos en
nutrientes de los ríos que sustentan la rica biodiversidad del área.En las estribaciones
de los Andes, donde comienza la llanura amazónica, los investigadores de la
Estación Biológica de Villa Carmen —ubicada al norte de Cusco, a cargo de la
ONG Asociación para la Conservación de la Cuenca Amazónica (ACCA)— están
ayudando a la población local a adaptarse al cambio climático desarrollando una
técnica para producir biocarbón, una forma de carbón vegetal usado como
fertilizante. Para hacer el biocarbón, se quema el bambú en un horno
aproximadamente a 800 grados Celsius mientras se limita el suministro de
oxígeno. Cinco horas más tarde, el bambú quemado es retirado del horno,
enfriado con agua y molido en pequeños pedazos. El proceso completo demora
alrededor de siete horas.Yngrid Espinoza Villaruel, coordinadora de
investigación agrícola en Villa Carmen, explica cómo funciona. “Al contacto con
la tierra, el biocarbón actúa como un imán, reteniendo nutrientes importantes”,
dice. “Eso ayuda a aumentar la fertilidad del suelo, contribuyendo al
crecimiento de diversas variedades de plantas”. La superficie porosa del
biocarbón es particularmente acogedora para las bacterias y hongos que
necesitan las plantas para absorber los nutrientes del suelo. También retiene
el agua y aumenta la fertilidad de la tierra haciéndola menos ácida.Se necesitan
alrededor de 5.000 toneladas de biocarbón para fertilizar una hectárea de
tierra de cultivo. Esta técnica es muy común en China, pero ha sido introducida
en Villa Carmen solo hace dos años. Los investigadores todavía están probando
la técnica para verificar si realmente beneficia el suelo. Me interesaba saber
si los habitantes locales la habían adoptado. Espinoza me dice que las primeras
señales son prometedoras, pero la producción de biocarbón todavía se sigue
probando en las plantaciones de Villa Carmen. “El objetivo es desarrollar y
mejorar la técnica y luego distribuirla a los agricultores locales”, dice.No
obstante, los estudios de la estación muestran que la técnica ya está generando
beneficios económicos a la población local. Heather Nobert, asistente de
investigación en biocarbón en Villa Carmen, dice que los investigadores les
compran a los pobladores el bambú que conviertan en biocarbón. “Pagamos 1.5
soles (alrededor de 50 centavos de dólar) por cada bambú que nos traen”,
informa. http://www.scidev.net